Desde hace unos años esperamos ansiosamente el día en que las tiendas en internet puedan enviarnos nuestros pedidos el mismo día utilizando un vehículo aéreo no tripulado (UAV). Desafortunadamente, los años siguen pasando y aunque estamos progresando, y la Administración Federal de Aviación (FAA) parece dispuesta a cooperar, aún no están permitidas estas operaciones de aviación no-tradicional, no tripulada de forma regular.

Al mismo tiempo, avanzamos a pasos cautelosos pero certeros en el área de vuelos más allá del alcance del observador (BVLOS), que muchos consideran el requisito indispensable para el despliegue completo de drones y taxis aéreos. Por lo tanto, podemos decir con certeza que ya estamos más cerca de recibir en la tarde un paquete que pedimos por la mañana y podemos estar tranquilos que todos aquellos que trabajan para que esto suceda están realmente intentándolo.

Pero ¿qué sucede si no es una simple caja de lápices, sino un litro de sangre que se necesita para salvar una vida a seis millas de distancia en una ciudad con horas de retrasos en el terreno debido a los atascos de tráfico y las reglas de tránsito incomprensibles? La perspectiva cambia cuando hay vidas en juego y el despliegue de plataformas no tripuladas puede ser la diferencia entre la vida y la muerte.

Algunas empresas en el mundo están teniendo gran éxito con las entregas médicas en países en desarrollo y regiones donde el espacio aéreo no está tan congestionado como Europa y USA. Zipline en África, con casi 2.5 millones de entregas de suministros médicos críticos a ubicaciones remotas y más de 19 millones de millas voladas parece ser el modelo de negocios que más se acerca a ser escalable y está creando una enorme base de datos de puntos críticos que deben abordarse antes de intentar los mismos procesos y procedimientos en espacios aéreos urbanos abarrotados de vuelos comerciales y de aviación general.

En América Latina, varias empresas están trabajando para crear un modelo de negocios escalable y replicable en el servicio de entregas médicas.  Entre ellas vale destacar a ORKID que está comenzando a dar los primeros pasos hacia entregas regulares de suministros médicos entre entidades corporativas, como farmacias virtuales o mayoristas farmacéuticos y  hospitales urbanos y centros de salud regionales. Contactamos a Santiago Pinzón, CEO y cofundador de ORKID para discutir las generalidades de la industria de entrega de drones y los detalles de su empresa y cómo fue su camino hacia este modelo de negocios.

"Analizamos una gran cantidad de posibilidades para nuestro modelo de negocios inicial y seleccionamos suministros médicos y la modalidad de negocio a negocio (B2B)", dijo Santiago con convicción. "En un país con una topografía complicada, baja densidad de caminos rurales y alto tráfico urbano, los ingredientes estaban ahí para lanzar una forma viable de entregar suministros que salvan vidas en distancias cortas, pero sobre obstáculos casi insuperables por transporte terrestre convencional".

Santiago Pinzon

ORKID tiene su sede en Bogotá, Colombia, una de las ciudades más congestionadas del mundo, dado su terreno montañoso, su infraestructura vial anticuada y su hermosa, pero complicada topografía.

Santiago, quien se graduó con una licenciatura y una maestría en ciencias en ingeniería aeroespacial de la Universidad Aeronáutica Embry-Riddle, ha reunido un equipo digno de una gran empresa de aviación y se ha embarcado en una cruzada para comprar drones básicos y luego modificarlos para que se adapten exactamente a las necesidades de su proceso de entrega.

"Nos negamos a creer en la opción binaria de crear nuestro propio dron o usar uno fabricado por otra persona", dijo Santiago con entusiasmo. "Decidimos comprar fuselajes simples con motores estándares y luego, utilizando nuestro conocimiento aeroespacial, los modificamos para crear una máquina voladora única capaz de entregas complicadas en terrenos difíciles".

Los diferentes intentos de las grandes corporaciones como Amazon.com y Google (Wing) de diseñar y fabricar sus propios drones ahora están estancados, y los esfuerzos para utilizar UAVs comerciales para establecer un modelo de negocios escalable también han fracasado pero por razones diferentes, entre ellas el tiempo de vuelo y la capacidad de carga. Pero basta con decir que se necesitaba urgentemente una alternativa, y ORKID parece haberla encontrado.

"Nuestro equipo analizó los esfuerzos de Amazon y otras grandes empresas para desarrollar sus propias plataformas y agregamos los datos anecdóticos de pequeñas entidades que intentaron usar cuadricópteros DJI para crear un servicio de entrega viable y nos decidimos por una solución alternativa", dijo Santiago. "Al analizar cuidadosamente los materiales a entregar, las rutas, y las regulaciones de la autoridad de aviación civil, pudimos diseñar una plataforma que haría el trabajo de manera eficiente y segura".

Cuando surgió el tema de la autoridad de aviación civil, la conversación se centró en la álgida trama de las regulaciones y la voluntad de las autoridades de permitir vuelos no tripulados sobre personas y propiedades.

"Colombia está muy avanzada en cuanto a regulaciones aéreas, y la autoridad de aviación civil está consciente de la necesidad de que estos insumos médicos lleguen a tiempo para salvar vidas, por lo que hemos tenido gran éxito en trabajar con ellos diseñando rutas y procedimientos que cumplan con la ley y al mismo tiempo cumplan con la misión." concluyó Santiago.

A pesar de que la experiencia de ORKID está limitada por ciertas reglas locales y el modelo de negocios aún debe probar ser sostenible a largo plazo, estamos realmente entusiasmados con la idea de ORKID de Gatear-Caminar-Correr a medida que agregan horas de vuelo y datos de entregas que les permitirán, eventualmente, tener un servicio de entrega médica a tiempo completo en una de las topografías más complicadas de América del Sur. Estas experiencias sumadas a otras como la de Zipline en África están creando enormes bases de datos que algún día serán utilizadas por la FAA y EASA, la industria y las universidades para diseñar y desplegar un sistema similar en los complicados espacios aéreos de Estados Unidos y Europa.